¿Cuál fue tu mayor vicio como escritor novel? ►
En esta edición de la Mesa Redonda Virtual nuestros tutores muestran su lado más humano y comparten con alumnos y lectores los vicios que sufrieron como escritores noveles. Es de justicia reconocer que, en tanto que ente en formación, un escritor no se ve nunca perfectamente limpio de vicios y malos hábitos, pero un paso en la buena dirección es reconocer el error, tenerlo controlado y luchar contra él con todas las armas al alcance.
Deja tu comentario y comparte con nosotros cual es o cual fue el peor hábito al que tuviste (o aún tienes) que enfrentarte.
Víctor L. Briones, tutor de ► Creación y Lenguaje Poético
Mi mayor vicio era (y aún hoy a veces me cuesta a pesar de que me lo tome como un ejercicio obligatorio) no aceptar la crítica. Ni siquiera la buscaba. Hoy sé que un par de voces sabias y de confianza te ayudan a mejorar y a ver lo que tu creador egocéntrico no puede. El único requisito para buscar esos críticos amigos es que desde el principio se destierre la complacencia.
Ana González Duque, tutora de ► Blogging y Redes Sociales para Escritores
Creo que mi mayor vicio, que -gracias al cielo- he conseguido subsanar, era el pensar que era mejor publicar con editorial que autopublicar con calidad. Probé ambas cosas y creo que me quedo, por el momento, con la segunda.
Rebeca R. Rus, tutora de ► Comedia Romántica
Pecaba mucho de impaciencia a la hora de finiquitar las novelas y de pasar a la fase de corrección, lo que sin duda es un grave fallo de escritor novel. Tras muchos meses inmersa en las estructuras y la trama, estaba tan deseosa de terminar que me precipitaba irremediablemente. Mal, mal, mal.
Chris J. Peake, tutor de ► Novela Fantástica
Menos mal que la revisión es un deber, el bendito deber de autocriticarse.
Isabel Martínez Barquero, tutora de ► Iniciación en el relato
Creo que mi mayor vicio fue el intentar decirlo todo, como si tuviera que agotar todos los temas en un solo libro. Me costaba ceñirme a una sola idea o a varias muy concretas. Aún no había descubierto las virtudes de la elipsis o la complicidad que genera con el lector la mera sugerencia, para que este complete y se sienta partícipe de la historia.
Raquel Martín Caraballo, tutora de ► Literatura Infantil y Juvenil
Mi mayor vicio es quizás no dar a leer mis manuscritos a nadie de mi entorno, al menos hasta que ha pasado bastante tiempo desde su cocción. No es tanto una cuestión de no aceptar críticas como de ser excesivamente celosa y reservada con lo que escribo (incluso en la fase previa de inspiración y de generar la idea). Es una especie de “superstición” personal, que me lleva a sentir que si hablo del libro antes de tiempo puede perderse por el camino. Soy consciente de que esta manía me puede limitar bastante, pues el punto de vista crítico de mis amigos cercanos quizás podría aportarme aspectos que yo no veo. Pero es un vicio que no he terminado de corregir. Escribo, corrijo y envío mis trabajos sin pasar antes por esos primeros filtros más próximos.
Yolanda González Mesa, tutora de los talleres de ► Productividad para escritores y Scrivener
Víctor J. Sanz, tutor de varios talleres de ► Narrativa
Me pasaba mucho lo que le comenta Isabel, es decir, querer contarlo todo. Cuando uno está embebido en una historia y la conoce bien, no ve el momento de soltar todo lo que sabe para que el lector disfrute tanto de la historia como uno mismo. Es un grave error, desde luego, pues el lector disfruta con una historia bien contada, si quiere información abundante no lee una novela, lee una enciclopedia.
mi mayor vicio era escribir en el bus, no me daba cuenta de lo incomodo que resultaba y cuando llegaba a casa tampoco tenía un gran poema escrito, ahora tampoco escribo súper poemas, pero si tengo la paciencia y la tranquilidad de sentarme delante del ordenador y dejar salir palabras para que luego mueran solas.
Hola, Ariel:
Muchas gracias por participar en nuestra mesa redonda virtual.
Interesante aportación.
Saludos.